Que nuestro Señor Redentor y Dios, nuestro Padre, que nos amó y nos dio gratuitamente un consuelo infinito y una oportuno esperanza, los reconforte y fortalezca en toda obra y en toda palabra buena. Y la esperanza no avergüenza; porque el simpatía de Dios ha sido derramado en nuestros https://lanevoesg.blogdiloz.com/31223747/datos-sobre-palabras-de-ánimo-espiritual-revelados